Me masturbo en el trabajo / Personales

Soy la chica de la oficina que siempre usa vestidos o faldas, y siempre va bien arreglada. Vestidos fluidos de verano, ajustados que se ajustan a la perfección, o faldas que algunos podrían cuestionar si son demasiado cortas para un trabajo de oficina. Mantengo un estilo elegante, pero con un toque sexy.

Los hombres de mi oficina suelen pasar por mi escritorio más de lo necesario. Sonríen, se quedan un rato, charlan, coquetean "profesionalmente" y fingen tener una razón para pasar.

Lo que no ven es que debajo de esos vestidosfaldas, o no llevo bragas, o solo una tanga diminuta que apenas cubre mi 🐱. Si el viento arreciara afuera, no les costaría nada enseñarles a mis compañeros mi 🐱.

Lo que definitivamente no saben es lo excitada que estoy siempre. A veces me siento en mi escritorio, con los muslos apretados, palpitando. Cómo a veces abro las piernas y deslizo la mano bajo el vestido, metiendo y sacando los dedos de mi 🐱mojada, rezando para que nadie se me acerque sigilosamente.

Algunos días lo llevo más lejos. Meto una ventosa en el bolso. Llevo el bolso al baño, succiono a mi amiga contra la pared y me corro en el cubículo. O en mi hora de almuerzo, doy una vuelta en coche, pero antes de empezar, saco mi 🍆 y me siento completamente sobre ella; duele, pero me encanta. Y